Milagro Haack con la poeta Elizabeth Schon.
Franklin Fernández.
F.F. –Milagro, ¿qué es para usted la poesía? ¿Qué nos diría sobre ella?
M.H. -El infinito, donde las búsquedas se hacen permanentes, eso me atrae, el asombro del detalle cotidiano, de la realidad visual de cómo se atrapa ese instante sin opuestos, sin límites. La poesía, es lo invisible de ese más allá que no podemos eludir.
F.F. -¿Qué la llevó usted a la poesía?
M.H. -Es una historia larga. Mis comienzos en el arte fueron desde la infancia, desde que deseaba danzar con el aire, aún no tenía conciencia de lo que sentía, por ello estudie ballet, con Nina, además, entré en la escuela de artes Arturo Michelena, allí se me abrió una de las tantas puertas. La puerta de la fusión de agudizar los sentidos. Por ese camino me vi dibujando, escribiendo en códigos en un diario como todas las niñas que sólo yo lo podía comprender, sólo yo tenía esa llave, hasta que un buen día me encontré con un libro cuando iba camino a la escuela de artes, una antología de poetas hispanos, y comprendí con el mismo asombro que algo de mi diario o libros negros como los llamé después, se acercaba, aún así, no lo percibí, como ahora. Fue estudiando teatro, escuchando poemas que me leían desde pequeña, que se fue despertando esa otra puerta donde estoy ahora, abriendo horizontes. Un detalle que aún conservo, es que mi madre me decía -naciste con un lápiz en la mano-, siento que fueron muchas pinceladas, que me llevaron a la poesía, lo natural, el viento, el terreno, mi abuela, mis ancestros…
F.F. –Más allá de esas pinceladas, ¿qué fue lo mejor que usted contempló o escuchó de la poesía?
M.H. -Vivirla, sentirla en su entorno natural, convivir con las palabras, ya que somos seres de diálogo, todo es palabra, signo, es referencia del pensamiento, de lo infinito del mismo ser y reconocerse a través de cada vivencia junto a ella, para trascender en su espacio.
Con el maestro Eugenio Montejo.
F.F. –Y en ese sentido, ¿qué es lo mejor de su poesía y qué es lo peor?
M.H. -Lo mejor, fue aceptarla, vivir para sentirla, es parte de mí, como ser en ojeos de esencia. Lo peor quizás, sería dejar de escribir, de buscar la fusión de las artes, dejar de regenerar todo un pasado, quizás, caer en el olvido y no continuar abriendo más puertas y encontrando nuevas llaves.
Con el poeta y ensayista José Napoleón Oropeza.
F.F. -Después de escribir un poema, ¿qué hace? ¿Cómo reacciona? ¿Qué es lo primero que siente frente a un escrito suyo? ¿Cuál es su primera impresión?
M.H. -El asombro de ver un papel en blanco en movimiento, por eso mi reacción es danzar, y continuar danzando. ¿Qué siento? Eso no lo puedo definir. Pero, acercarme al poema, leerlo en voz alta, entonces, viene la Milagro crítica, y allí originamos una conversación, sobre el futuro de ese escrito. Por lo general, es asombro, sin dejarme llevar por lo emotivo de ese instante, ya que aunque sé que debo contar o trasmitir una sensación, tengo una gran tendencia crítica, ya que me atraen los símbolos. Entonces, investigo, el por qué, el cuándo y el dónde, hasta encontrar la armonía visual, por ello, sigo danzando, hasta que se unan las voces en una sola.
F.F. -¿Tiene alguna predilección por autores celebres, raros o desconocidos? ¿Alguna inclinación por poetas o escritores extranjeros? ¿De qué fuentes de la poesía o literatura universal ha bebido?
M.H. -Varias preguntas. Bien, tengo una tendencia por los escritores simbolistas, místicos, esotéricos, (benigna combinación). Soy una amante de mi idioma natal, de los poetas de habla hispana, leo muchos a los hispanos, y aquí incluyo, que aún me falta mucho por leer y como dice Cadenas, que el idioma es un arte para toda la vida, y cada día es encuentro y reencuentros fascinantes… y eso me llena. De las fuentes, he bebido, que tengo como voces que me llaman, citando algunos, como Borges, Fray Luis de León, Lezama lima, Martín Adán, Enriqueta Arvelo Larriva, Fernando Paz Castillo, mi amado Gerbasi, Alejandra Pizarnik, Elizabeth Schön (con ella tengo diálogos muy visuales, de encuentros, ella es muy cósmica, y eso atrae). Vaya, son muchos, esto de lector es interminable, Emily Dickinson, Rilke, Stéphane Mallarmé (son una fascinación, cuando menos lo esperas allí estoy con ellos), también, recurro mucho a los pensadores como Arthur Schopenhauer, Nietzsche, San Agustín, Heráclito, Sócrates, Santo Tomás de Aquino (encontré en una venta de libros usados sus obras completas, pertenecían a un seminarista), Martín Heidegger, Paul Sastre, María Zambrano, (es especial para mi su pensamiento: EI hombre y lo divino. Filosofía y poesía..., es especial…). Investigo sobre la astrología, otras ciencias, culturas antiguas, religiones, libros de artes y vida, eso me encanta como la de Rodin y Camille… Por favor que me perdonen, mis seres leídos, ya que si olvido a Rubén Darío, Eliot, Federico García Lorca, Huidobro, Vallejo, Neruda, Girando, entonces, nunca se termina de leer y volver a encontrarse, y como veras, aún no llego a la quinta esencia.
F.F. -¿Cuál es su estrategia fundamental para escribir un buen libro de poemas?
M.H. -Lo natural, saber escuchar al viento, los mensajes, y no lo creerás, pero tengo un pájaro que me despierta para que asuma lo blanco. La noche es mágica, es otra visión con otros entes, y dentro de ella, vienen imágenes y tengo que escribirlas muy rápido, cualquier detalle de lo que me rodea, es la mirada que se convierte en decir, decir, y continuar en diálogo con lo sencillo que es permanente, aunque, muchos me expresan que debo menos arriesgada con el lenguaje, pero, cómo no decir que tengo una mesa preñada de velas, si existe, eso no puedo dejarlo fuera de un escrito. Escribir un buen libro de poesía, eso es grande, y trato de hacerlo.
Con la magnánima Ana Enriqueta Terán.
F.F. -¿Qué imágenes resultan recurrentes en su escritura?
M.H. -He vivido en espacios distintos, por ello, el silencio como búsqueda es recurrente, el movimiento, lo aéreo que trato de alcanzar, las aguas con su danza ancestral. Quizás, tenga muchas ya que el signo está dentro y fuera de su silencio.
F.F. -¿Cuál es el valor de la libertad en su poesía?
M.H. -La libertad de la poesía es asumir los riesgos de ella misma, allí, está su valor para defenderla en totalidad, en expresión, en todo por este TODO que me lleva de la mano, acercándome, siempre a traspasar límites de fronteras con una muy clara conciencia de los mismos riesgos que asumo del renuevo que me solicita, siempre.
F.F. -¿Qué quiere entregarle Milagro Haack al lector a través de sus libros?
M.H. -La fusión, el sentir sin desiguales, la presencia de una voz, que quizás, pueda ser reconocible en cualquier espacio, quizás…, pero tengo algo presente, que hay no caer en los “gustos”, y ser mejores lectores, esa es otra de mis búsquedas. No creo en gustos, sino en la creación y regeneración del arte, así como tú lo haces, eso me parece maravilloso, expresivo y con una gran calidad de unión a través de los objetos que muchos ya no miran, y existen, como el viento que está en este instante danzando con la cortina de mi estudio, libre, y lo siento poético por eso.
F.F. -¿Cómo es su relación con la poesía? ¿Cómo es su relación con los poetas? ¿Cómo es su relación poética con las cosas?
M.H. -Bien, siento que debe ser equilibrado, por un lado, por el otro siento que mis búsquedas no terminan, por ello, estoy en constante movimiento, regenerando los espacios habitados y por habitar. Nunca cierro puertas, y eso es muy significativo para mí como ser de diálogo.
F.F. -¿Cuál debe ser la función de un poeta en un mundo globalizado?
M.H. -Asumirlo, es uno de los grandes pasos ya dado por muchos, es como romper el cascaron. Hilar y fusionar lo que se revela de otras formas de luces, que intuimos, de otros terruños, como propios, y eso es un salto, y no al vacío, sino para el agasajo del intercambio cultural, y en otros campos, estando aquí y allá, es muy vistoso, y me agrada.
Con Belkys Arredondo Olivo, Ximena Benitez y Edgar Vidaurre.
F.F. -Háblame de Lalupe.com ¿Cómo asumió usted el reto de ser su director de arte? ¿Qué le atrajo de esta virtualidad lúdica, poética?
M.H. –Ante todo La Lupe como portal literario ya existía, antes de esta nueva visión. Por el año 2005 entro en conversaciones con el director y dueño del portal La lupe.com; Ugo Calvigioni, escritor, una persona muy conocedora lo digital, muy inquieto, a saber que en Internet, si no renuevas, muere, por ello, siempre le manifestaba darle un giro regenerativo, más, cercano al artista. De allí, comienza, toda una investigación de portales literarios, de lo qué desea un creador, con horizontes de no ser otra más, entre tertulias y lugares de “autores pasivo” (esto no niega que existen portales con calidad). Buscándome, como escritor, ingreso en esta nueva visión, donde me confiaron la dirección de arte, ya que, va más allá, la unión de países, es un proyecto de visión de un portal de difusión de nuevos diálogos, donde la fusión de las artes se encuentran, la poesía digital, los collage, arte digital, arte, allende del diseño, y las artes visuales, son enlace para la proyección de una obra saliéndose de lo frío de la electrónica cuando se plasma, y lo ves. Esto es un claro espejo al ver tu trabajo, matizado con sonido e imagen, eso, mueve fronteras y llega profundamente al espacio donde se inició esa escritura por parte del autor. Siento que lo corpóreo es algo mucho más intenso, por ello, me motiva, me moviliza a seguir y creo que las metas de La Lupe respecto a la amalgama del discurso, están dadas y para eso y mucho más, claro, con un punto de referencia, que es la apertura, bien claro, vuelvo y digo de “visión y diálogo”, de aceptación de ideas, de forma y de fondo; digo, sin dejar de valorar el ojo del otro, del logró de una fase, ya que estoy en mi país, y el portal es de Argentina, ya con eso, entramos en sin límites de espacio, entonces, esta venezolana asumió el reto, porque cree y siente, el paso recorrido durante, ahora, y el eterno después, aprendiendo, operando desde adentro un portal activo, e invertir sólo con mi capital humano, eso me atrajo y mucho, sin embargo, cumplí un espacio, espero que lo estimen, aunque la satisfacción personal, es mucho más grande…,eso es importante para mi persona, como también, continuar pensando, en canalizar la visión de un artista, que no solamente tiende, sino que se esparce, que produce giros dentro de su espacio, necesita manifestarlo por ello está, porque el artista es buscador y en sus búsquedas renueva y crea regenerando tendencias, no al contrario, el artista da vida a los portales, no al contrario.
Milagro, acompañada de Rafael Cadenas.
F.F. -Su condición de poeta la ha llevado a experimentar con otras expresiones artísticas: Danza, pintura, collage, fotografía. Para usted, ¿cuáles son las semejanzas o las diferencias entre uno y otro lenguaje, entre uno y otro medio de expresión?
M.H. -Hay más semejanzas que diferencias, las diferencias lo hacen los artistas que crean en un género específico. Todo es diálogo, el ser se expresa con las manos cuando charla, danzar, es manifestarse, porque el cuerpo habla, dibujar es dar una lectura y así, ha sido siempre, somos los artistas que separamos y conceptuamos el arte.
F.F. –Bien, cambiando el tema. Jacqueline Goldberg criticaba hace poco la mala organización de los concursos literarios en nuestro país, ya que se cansó de esperar el veredicto final de uno de los concursos de poesía más importantes; la bienal Ramos Sucre, porque la decisión se postergó, retrasó y prorrogó más allá de lo normal. Jacqueline se retiró para entregarle el manuscrito de su poemario, "Verbos Predadores", al sello Equinoccio, de la Universidad Simón Bolívar. Pasaron los meses y, para su sorpresa, “Verbos Predadores” había ganado el concurso. A fin de cuentas, el jurado resolvió declarar el premio desierto y otorgar un accésit a tu poemario "Relámpago entre dos". ¿Cómo se siente Milagro Haack después de ese veredicto?
M.H. -Me siento bien, fue una sorpresa tras otra, estando en Caracas, no lo sabía, me enteré por amigos, a mi llegada a Valencia. Ya sabemos lo que pasó, al declarar desierto la bienal en mención poesía, y el jurado y no la comisión organizadora (como han tratado de distorsionar) fueron que en su conjunto, expresaron a través de sus lecturas, un Accésit al libro Relámpago entre dos. Estoy conforme porque es la primera vez que envío a la “Bienal José Antonio Ramos Sucre”. Sólo espero, verlo publicado y continuar en este oficio creativo, donde la genialidad, pareciera pasar, quizás por debajo de la mesa, donde debemos pensar que reconocer al otro, es reconocerse a uno mismo como un artista, como ser humano, esto es crecimiento en todos los ámbitos que exploramos, asimismo, siento, si anulas al otro te anulas a ti mismo, eso es lo oscuro, sabiendo la época que vivimos en nuestro país. Asimismo, mi tercer libro “Puertas que no me pertenecen” por los años 80 recibió un distintivo, el cual fue notorio ya que el ganador de “la Bienal José Rafael Pocaterra” fue maestro Teófilo Tortolero. Mi oficio es callado, muchos pueden dar fe de ello, por eso, pertenezco a la generación de los 80, sin meditarlo, sin proponérmelo, además, casi no envío a concursos, este, es más fue iniciativa de mi hija Christinne, la que desde Caracas el 27 de marzo, lo envío y se lo agradezco.
Sobre lo de Jacqueline, sigue siendo la ganadora de la “Bienal José Antonio Ramos Sucre” y eso me complace a pesar de los detalles que de una u otra parte no se dieron, como sabes, las normativas de cada convocatoria, pero no puedo juzgar, sólo reafinarte que Jacqueline es la ganadora aunque el premio esté desierto y por ello me siento bien conmigo misma y con la poesía como diría mi diosa blanca Elizabeth Schön “la poesía es la gran regeneradora de las artes”, visión que profeso con todo la unificación que esto implica de un creador como lo es ella…
F.F. –Eso es bueno, porque al momento de enterarme del veredicto, las llamé a ambas. Y tanto en ti como en Jacqueline, apreciaba que sentían una por la otra; un profundo dolor y una inmensa pena. Jacqueline me confirmó que se sentía muy mal por la posición en la que te había dejado. Ahora bien, ¿no es incomodo aceptar un premio que se le acababa de conceder a alguien, en este caso en particular; a una excelente poeta con más de veinte años de reconocida trayectoria, aceptada por la crítica y el público en general?
M.H. –Bien, por ti me enteré, y otras personas amigas, y lo agradezco desde el alma. Sobre la conversación con Jacqueline, siento, que fue duro, muy duro para ella, lo cual visualizo y siento mucho que haya pasado, pero jamás debe sentirse mal conmigo..., por eso, siento que dar es mucho mejor que dejar en vacíos, incertidumbres alejándose de la esencia creativa, de lo ya conocido, trasmitido, y lo que queda por transmutar, en el quehacer poético, visual de todos los artistas, siendo una sola voz hacia lo universal. También, reconozco que Jacqueline, es una gran escritora, (la leo siempre la he leído, y compartimos algunas veces aquí en Valencia en eventos donde fue invitada) la cual fue la ganadora de la bienal, aunque este desierto, como te lo subrayo antes, por ello, el diálogo es eminentemente vital, por ello, su reconocimiento es real. Esta es mi reflexión, muy sana con conciencia, ya que sabes, de los entredichos y lo digo desde este espacio cuando abro puertas, y conozco las realidades de ambas partes, verdades, sintiendo, que no soy la persona indicada de develar. Sólo hay que tener sabiduría, aceptación, prudencia, y mucho más. Por ello, me siento libre, y muy agradecida por haber sido leída, reconociendo al mismo tiempo, los otros, mis iguales en este camino de búsquedas quizás más, transcendentes, aunque, no se sabe, sólo el espacio, el después, lo dirá y con esto te reafirmo, que no estoy de acuerdo con recibir un premio no mío, estoy bien, te repito, conmigo misma, con mi oficio visual poético, con todos, con Jacqueline. Otra cosa que me viene, a la mente es algo que escribí, sobre “los credos críticos en mi país” creo haberlo dicho antes en una entrevista y texto que después escribí -soy una extranjera en propia tierra-, pareciera, que sí…
F.F. -¿Qué lugar ocupa hoy nuestra poesía en el continente?
M.H. -Soy futurista y dadora, por ello, sin caer en lo encantado, en nuestro continente sudamericano, existen y existirán grandes creadores. Por ello, siendo nuestro idioma el más fuerte, el más hablado, es de tendencia estar de inicial, en la vertiente, sin embargo, seguimos siendo callados, y no generamos publicidad de nuestros talentos, eso es arte generativo, no se debe callar voces, como la de Gerbasi, por darte un ejemplo, se debe, promocionar mucho más, y con toda esta difusión visual masiva, y tecnológica mucho mas. Por ello las herramientas las hay, sólo falta la unión para regenerar las fuentes y las venideras que también necesitan de ese abrir puertas.
F.F. -¿Qué lugar ocupa hoy su propia poesía en el ámbito venezolano?
M.H. -Realidad, poca publicidad, mucha incertidumbre, sin embargo, hay mucho para dar al mundo, por eso, personalmente, con buenos escritores como Luz Machado, Ida Gramcko, Juan Sánchez Peláez, Rafael Cadenas, Eugenio Montejo, muchos escritores contemporáneos, y jóvenes dando la talla. Venezuela tiene rostro poético y muy de altura.
F.F. –Gracias Milagro…
M.H. –Gracias a ti Franklin, por tan buen instante de diálogo, por hacer vibrar cosmos y por supuesto, el disfrute de intercambios con otro artista, como tú.
Sus cinco hijos... y uno más.
Nota: *1. Actualmente, Milagro Haack ha aceptado ser nuevamente directora de arte de LaLupe.com.
Mis saludos Franklin, y muy agradecida por publicar la entrevista con las imágenes de algunos de mis cercanos y sobre todo las de mis hijos. Fue un disfrute volverla a leer., y saber que eres muy audaz con tus preguntas, vas a la esencia, y develas lo que está por develar.
ResponderEliminarVaya que honor, y saber de los escritores muy buenos en este país, como Eugenio, es un placer haberlo conocido y estar en sus encuentros, escucharlo....
Agradecida
Siempre
Milagro Haack